Hace un siglo, un edificio bien ventilado se consideraba una buena medicina. Pero cuando llegó el Covid-19, nuestros edificios apenas respiraban. ¿Cómo pasó esto? ¿Cómo permitimos que entre aire fresco?
La nueva guerra contra el mal aire

Hace un siglo, un edificio bien ventilado se consideraba una buena medicina. Pero cuando llegó el Covid-19, nuestros edificios apenas respiraban. ¿Cómo pasó esto? ¿Cómo permitimos que entre aire fresco?